Almohada eléctrica

Uno de los tratamientos recomendados para aliviar los dolores musculares es la aplicación de calor. Una de las opciones más buscadas para este tipo de método es el uso de la almohada eléctrica, también conocida como almohadilla o alfombrilla eléctrica. Si deseas conocer más, descubre a continuación qué es, cuáles son sus características principales y los beneficios de su uso.

¿Qué es una almohada eléctrica?

Se conoce como almohada eléctrica a un tipo de cojín o manta gruesa que se conecta a una toma de electricidad para generar calor. Para su funcionamiento se cuenta con una resistencia, un termostato y mecanismos de seguridad que permiten que se apague al alcanzar cierta temperatura. Se pueden encontrar ejemplares de todos los tamaños, ajustados al uso en el cuello, piernas, espalda o pies.

También, son muy variados en la forma de aplicación e incluso disponen de cierres que permiten la fácil sujeción a la zona del cuerpo. Se pueden usar como medida terapéutica, aunque muchos usuarios la emplean para calentar la cama o disfrutar del calor que ofrecen.

Características de las almohadas eléctricas

Las almohadas eléctricas se diferencian principalmente por estar conectada a una toma de corriente y por suministrar el calor necesario para trabajar los músculos. Otros aspectos destacados que las caracterizan se resumen de la siguiente manera:

• Cuenta con una resistencia, un mecanismo que se calienta al pasar la energía eléctrica. Según la intensidad del calor, lo que se busca es estimular el suministro de sangre para lograr una reducción de la presión y lograr aliviar los músculos.
• Los hay de todo tipo. Se pueden usar en las cervicales para tratar de forma térmica el dolor muscular y articular, un tipo dorsal que se ajusta en la espalda, hombros y cuello. También, hay un modelo lumbar que actúa sobre la parte baja del abdomen.
• Disponen de distintos niveles de calor, por lo que si se emplea de forma terapéutico, se puede aprovechar las distintas sesiones para incrementar la sensación térmica. Es ideal para entumecimiento, reducir la tensión, para estimular la circulación o tratar los dolores menstruales.
• Es recomendable usarla por un espacio de tiempo no superior a los 20 minutos para evitar riesgos de quemadura. De igual manera, al funcionar con electricidad se debe tomar en cuenta las precauciones necesarias.

Las mejores almohadas eléctricas del mercado

El mercado cuenta con excelentes ejemplares que permiten disfrutar de los beneficios que ofrece el calor en estas almohadillas. Un resumen de los modelos más llevados incluye los siguientes:

• Beurer HK Confort: Es un modelo en forma rectangular que se puede utilizar en cualquier parte del cuerpo para administrar calor. Cuenta con varios niveles de potencia, es muy fácil de limpiar y es muy segura de usar.
• Bosch Relaxx Therm L: Con seis niveles de calor, es una de las almohadas eléctricas más buscadas en el mercado. Tiene una agradable distribución del calor para que se pueda percibir rápidamente por la piel. Es muy fácil de usar, aunque se requiere precaución.
• Solac CT8680 Helsinki: Es una almohadilla térmica para uso lumbar, ya que se ajusta a la cintura para tratar todo el contorno abdominal. Sin embargo, debido a su forma es posible aplicar el calor en otras zonas del cuerpo. Es muy suave al tacto e hipoalergénica.

Si debes usar una por prescripción médica, es recomendable que el profesional de la salud indique cuál es la mejor en función de la condición. Hay un modelo para cada necesidad.

Ventajas de la almohada eléctrica

Son muchos los beneficios que aporta el uso de la almohada eléctrica en los tratamientos lumbares. Dentro de los más sobresalientes se pueden enlistar los siguientes:

• Emiten un calor controlado, sin variaciones. Esta cualidad, permite disfrutar de una terapia completa para una penetración de la temperatura ideal con el fin de reducir la tensión muscular.
• Todos los ejemplares cuentan con temporizadores que se pueden programar para recibir el nivel de calor ideal para la terapia. Son perfectas para los días de lluvia e invierno.
• Cuentan con una estructura que se puede desarmar para lavarlas a máquina y seguir usándolas sin inconvenientes. Son cómodas y se disfrutan al máximo.

En resumen, la almohada eléctrica es un tipo de manta que emite calor para aprovechar las bondades de la terapia térmica. Se pueden colocar en cualquier lugar del cuerpo para sentir un efecto inmediato.